Los orígenes del ritual en la iglesia y en la masonería
La voz del silencio
Helena Petrovna BlavatskyFICHA TÉCNICA
- Editorial: Ediciones Librería Argentina (ELA)
- ISBN: 9788499500522
- Colección: Masonería
- Fecha de edición: 2011
- Nº edición: 1.ª
- País: España
- Idioma: Español
- Encuadernación: Rústica
- Medidas: 17 x 24 cm
- Nº páginas: 96
Los orígenes del ritual en la iglesia y en la masonería
La voz del silencio
Helena Petrovna Blavatsky
Formato papel
[DISPONIBLE]
pvp.14,95 €
En toda la superficie del planeta, desde el Polo Norte hasta el Polo Sur, desde los helados golfos de los países nórdicos hasta las tórridas llanuras de la India meridional y del corazón de América, desde Grecia hasta Caldea; el Fuego Solar ha sido adorado como símbolo del Poder Divino creador del Amor y de la Vida.
La unión del Sol (el elemento masculino) con la tierra y el agua (la materia-elemento femenino) se ha conmemorado en los templos esparcidos por el Universo entero.
Aunque no se pueda recurrir al testimonio de la historia, es un hecho histórico -pues una gran cantidad de hechos relatados por los escritores de la antigüedad vienen a corroborarlo- que el ritual de la Iglesia y de la Francmasonería surgieron de la misma fuente y se desarrollaron paralelamente. En sus orígenes, la Masonería fue un gnosticismo arcaico o cristianismo primitivo y el ritual de la Iglesia era y es el de un simple y puro paganismo exotérico remodelado, ya que no podemos decir reformado.
La Masonería, a pesar de sus innovaciones y accesorios modernos (particularmente la introducción del espíritu bíblico), hace el bien en los planos físico y moral. Es una verdadera ecclesía en el sentido de unión fraternal y de ayuda mutua; era la única “religión” del mundo, si consideramos que esta palabra se deriva del verbo “religare” (unir), puesto que une a todos los hombres que pertenecen a ella como si fueran “hermanos”, sin hacer distinción de razas ni de creencias.
Sí; hubo un tiempo en que la Iglesia y la Francmasonería fueron una, fue en los siglos de intensa reacción moral; período de transición, época de lucha en la que el pensamiento era denso como una pesadilla. Así que, cuando la creación de nuevos ideales condujo al derribo aparente de los viejos templos y a la destrucción de los antiguos ídolos, la cosa terminó reconstruyendo estos templos con ayuda de los antiguos materiales y erigiendo los mismos ídolos con nombres nuevos.
H. P. Blavatsky